Después de tres meses de larga espera, nuevamente el Gallito saltó a la cancha del Corregidora. El rival, argentino; el técnico, Mohamed; el resultado, lo de menos. Lo importante se viene dentro de una semana. Y aquí bien vale tomar la palabra después de un silencio prolongado. Hay que poner los puntos sobre las íes, hacer un recuento de lo bueno y lo malo, y como bien se dice, de lo perdido, lo que aparezca y de lo ganado, lo que se pierda. ¿Qué te dolió más, amigo lector, el descenso largamente anunciado y decretado desde los escritorios, o bien la desbandada en nuestro equipo? Pude entender la salida de Mateo, de Juanito, de Becerra, de Fer López, del mismo Chava. Bien por ellos, todos se pudieron colocar en equipos de Primera. Eso sí, me dolió y en serio, la venta de Mauro, del Mago y de Bosco a Dorados. Será difícil acostumbrarse a tenerlos como rivales, después de lo vivido en los dos últimos años. Estoy seguro que para ellos también será algo extraño enfrentar a Gallos.
El apunte
Sigo pensando que el descenso se debió en buena parte a los “aciertos” del dúo dinámico Patronato-Directiva. Gallos estaba en Primera, pero en asuntos de pantalón largo y escritorio era un equipo llanero. Ahora, nos hablan de aspiraciones a volver al máximo circuito en un año. ¿Les creemos? ¿Habrán aprendido algo de la amarga experiencia? Yo tengo mi costal de dudas, pero...¡Qué no se me acuse de severo! También sé reconocer los aciertos de nuestros directivos. El primero y más importante...¡Qué hay equipo!, Si, gracias a las personas que son blanco de mis comentarios, tenemos fútbol, tenemos partidos en el Corregidora y después de varios meses de incertidumbre llamados Junio y Julio, nuca estuvo en duda que Gallos iba a seguir existiendo. Ello debe agradecerse, porque, han sido ellos y sólo ellos los que nos han dado fútbol en los años más recientes. ¿Quién más? No hay, de no ser por ellos, Gallos no existiría, así de fácil. Y yo prefiero tener a mi equipo a vivir huérfano de pasión. ¿Qué como afición nos merecemos otro trato? ¡Claro que sí!, ¿Qué nos merecemos un proyecto deportivo serio y un equipo de Primera División? ¡Por supuesto! Pero no hay más. Este equipo está tatuado en el corazón de ciertos individuos que tenemos el placer de sufrir. Por eso estoy con Gallos, todo el corazón con los jugadores y el cuerpo técnico y con un voto de confianza, sólo un voto de confianza hacia la Directiva y el Patronato. Aquí vamos, a volver a empezar, a lavar la playera, a cancelar los compromisos cada Sábado un poco antes de las siete. Y otra vez ese dulce hábito de entrar al Corregidora, pasar el registro, y ocupar tu lugar de siempre en la grada. Sabiendo de antemano que estamos en el infierno, donde ocurren todos los males posibles, donde nadie existe. Porque la A es eso, un auténtico calvario para afición y jugadores. Algo degradante porque juegas contra las filiales de Primera contra equipos de nombres tan extraños como Socio Águila o Xonicuintles de Tijuana.
Para reflexionar
¿Por qué no escribí durante estos tres meses? Sé que no necesito darte una explicación ni tu me la estas pidiendo amigo lector. Todos los Gallos que no jugamos en la cancha pero que si sufrimos y gozamos en la tribuna, no vivimos un día sin que al menos por un instante no tengamos un recuerdo, un pensamiento, el hambre de una noticia fresca en torno al equipo. Gallos Blancos es un icono que hemos incorporado a nuestra vida. Quise renovarme, dejar atrás lo vivido durante los últimos dos años maravillosos. Quise convencerme de que otra vez arrancamos de cero, y quise hacerlo sin resabios, sin reprocharle nada a nadie y como ya dije, a partir de este momento darlo todo por los jugadores que defienden esa gloriosa playera con dos estrellas en su escudo para esta división. Para la directiva y el Patronado, un frío, pero muy frío, voto de confianza, y un Gracias, apenas audible, por darnos equipo. ¡Suerte Gallos, estamos juntos otra vez!
manriquemind@yahoo.com.mx
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